Había escrito una reflexión muy ñoña sobre lo chungo que es esto de "hacerse mayor" , a raíz de los sentimientos que surgieron el pasado dia 4 en mi cabeza, cuando fui con Oscar y Anina al acuario de Gijón. Parece que se ha perdido por ahí... como después de un año, sigo sin controlar muy bien el rollo este del blog. Quizá mejor así. Venía a decir lo que se echa de menos lo que eramos, el tiempo que teníamos y lo bien que lo pasabamos juntos, cuando no había cienmil obligaciones. Y lo que me alegra seguir pudiendo tener "flashes" de aquello, en días como el pasado jueves cuando nos fuimos de excursión al acuario de Gijón. Lo pasé bomba. No solo por el acuario (el cual recomiendo a todo el que quiera ir y tenga 12€ para pagar la entrada), fue más por la compañía y por sentir durante unas horas que todo sigue igual, aunque haya cambiado... ¡Vaya ya estoy "ñoñeando" otra vez!, mejor veis las fotos.
2 comentarios:
La verdad es que nunca he entrado en ese acuario, tengoa ganas de conocerlo.
Lo ñoño siempre es tierno ;)
¡¡¡Pues si ves el de A Coruña!!!
Lo malo que tiene, es que está lleno de cascarilleiros (coruñeses, vamos)
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